26 de mayo de 2025
Descubre por qué empeoran las piernas cansadas en verano y cómo aliviarlas con cremas frías, suplementos drenantes y buenos hábitos. ¡Tu circulación lo agradecerá!
Parece que en verano todo tiene que ser ligero: la ropa, las comidas, el ánimo. Pero a muchas personas, lo único que se les hace realmente ligero… es el sueño, porque no consiguen descansar del todo. Las piernas cansadas pesan, los tobillos se hinchan, el cuerpo no circula como debería.
Hablamos poco de ello, como si no tuviera importancia, pero la retención de líquidos en las piernas es un problema real. Y no, no hay que acostumbrarse. Se puede aliviar. Solo hay que saber cómo.
¿Por qué se agravan las piernas cansadas y la retención de líquidos en verano?
La sensación de piernas pesadas, hinchadas o incluso con calambres tiene un origen muy claro: la circulación venosa y linfática se vuelve menos eficiente, y eso hace que los líquidos se acumulen en las zonas más bajas del cuerpo.
Pero, ¿por qué justo en verano se intensifica? Hay varias razones:
El calor dilata las venas
En cuanto suben las temperaturas, se activa un mecanismo natural: los vasos sanguíneos se dilatan para intentar regular el calor corporal. Pero esa vasodilatación también hace que la sangre circule más despacio y se acumule más fácilmente en las extremidades, sobre todo en las piernas. De ahí viene la sensación de pesadez, hinchazón y, en algunos casos, molestias o calambres.
Estilo de vida más sedentario
En verano la rutina cambia. Las vacaciones, los viajes, el teletrabajo o las jornadas intensivas hacen que, sin darnos cuenta, pasemos muchas horas sentados, de pie sin movernos o simplemente menos activos. Y cuando los músculos no se mueven, la circulación tampoco. El sistema venoso necesita del movimiento muscular para “empujar” la sangre de vuelta al corazón. Si no se mueve, se estanca.
Cambios hormonales
Las mujeres suelen experimentar estos síntomas con más frecuencia, especialmente durante el embarazo, la menstruación o la menopausia, ya que los estrógenos afectan al tono de las paredes venosas y favorecen la retención de líquidos.
Falta de hidratación
Muchas veces uno piensa que bebiendo menos se evitará la retención. Pero el cuerpo funciona justo al revés. Cuando nota que no hay suficiente líquido disponible, lo retiene. Y ese líquido acaba acumulándose donde menos lo queremos: en tobillos, piernas, abdomen… Por eso, una buena hidratación es fundamental para evitar este círculo vicioso.
Cremas y geles fríos: alivio inmediato y duradero para las piernas
Cuando las piernas pesan, un gesto tan simple como aplicar una crema o un gel frío puede suponer un gran alivio. No solo es una sensación agradable, sino que también tiene un efecto real sobre la circulación y la inflamación.
¿Por qué funcionan estos productos?
Porque están diseñados para estimular la microcirculación, reducir la inflamación y calmar el malestar. Sus ingredientes actúan de forma tópica y rápida, y algunos de ellos tienen un efecto vasoconstrictor que ayuda a mejorar el retorno venoso.
Por lo tanto, al elegir una crema para piernas cansadas o un gel frío, es importante fijarse en los principios activos de su composición:
- Mentol y alcanfor: proporcionan una sensación de frescor inmediata que activa la circulación superficial.
- Vid roja: ayuda a fortalecer los capilares y mejora el tono venoso.
- Castaño de Indias: un potente venotónico natural que reduce la inflamación.
- Rusco: mejora el retorno venoso y reduce la congestión.
- Hamamelis y centella asiática: con propiedades calmantes, antiinflamatorias y tonificantes.
Estos compuestos no solo aportan bienestar al instante, sino que, con el uso continuado, ayudan a mejorar la circulación en general.
¿Cómo aplicarlos correctamente?
Lo ideal es aplicar el gel frío para piernas cansadas al final del día, con un suave masaje ascendente, desde los tobillos hacia las rodillas o incluso hasta los muslos. Ese movimiento favorece el retorno venoso y potencia el efecto del producto. También puedes usarlo por la mañana si sabes que vas a pasar muchas horas de pie.
Guárdalo en la nevera si quieres un extra de frescor… ¡funciona de maravilla!
Suplementos drenantes: apoyo interno para combatir la hinchazón
No siempre es suficiente con aplicar productos por fuera. Cuando la retención de líquidos es persistente o se repite cada verano, puede ser buena idea combinar los cuidados externos con suplementos orales que ayuden al drenaje interno.
¿Qué son los productos drenantes?
Son fórmulas naturales, muchas veces a base de plantas, que estimulan el sistema linfático y renal para favorecer la eliminación de líquidos. No se trata de diuréticos agresivos, sino de complementos suaves que ayudan al organismo a funcionar mejor.
Ingredientes habituales de los productos drenantes
- Cola de caballo: con efecto diurético suave y remineralizante.
- Diente de león: ideal para eliminar líquidos sin perder potasio.
- Té verde, té de Java (ortosifón): antioxidantes y muy eficaces como apoyo drenante.
- Centella asiática: mejora la circulación venosa y ayuda con la sensación de pesadez.
- Hesperidina y diosmina: refuerzan las paredes de las venas, mejorando su resistencia.
Hay formatos para todos los gustos: cápsulas, viales bebibles, soluciones concentradas para diluir en agua. ¡Ven a preguntar a nuestra farmacia!
Ah, y por supuesto, un consejo muy importante: al tomar productos drenantes, es fundamental mantener una buena hidratación para facilitar el proceso de eliminación y evitar el efecto rebote.
Hábitos diarios que ayudan a mejorar la circulación y reducir la hinchazón
Más allá de cremas y suplementos, hay pequeñas rutinas que, si las incorporas a tu día a día, pueden mejorar notablemente cómo se sienten tus piernas al final del día. Y lo mejor: son sencillas, no cuestan nada y muchas veces solo requieren prestar un poco más de atención a tu cuerpo.
Hidrátate, incluso si no tienes sed
Beber poca agua favorece la retención. El cuerpo “guarda” líquido cuando detecta deshidratación. Lo ideal es beber entre 1,5 y 2 litros de agua al día, repartidos en pequeñas cantidades. Puedes añadir infusiones frías, rodajas de fruta o incluso suplementos drenantes diluidos si te cuesta beber solo agua.
Mueve las piernas con frecuencia
No hace falta correr una maratón. Basta con que, si estás sentado, te levantes cada hora. Si estás de pie, dobla las rodillas, sube y baja los talones, da pasos en el sitio. El movimiento es el mejor antídoto contra la circulación estancada.
Termina la ducha con agua fría
Una de las mejores formas de reactivar la circulación. Puedes alternar agua tibia y fría (si lo soportas) o terminar la ducha con un buen chorro de agua fría desde los tobillos hacia arriba. Notarás alivio inmediato y tus piernas te lo agradecerán.
Eleva las piernas cada día
Si puedes, al llegar a casa túmbate unos minutos con las piernas elevadas sobre un cojín o contra la pared. Es suficiente con 10-15 minutos para favorecer el retorno venoso y reducir la hinchazón.
Evita ropa muy ajustada o tacones altos
La ropa demasiado ceñida y los tacones prolongados dificultan el retorno venoso. Si tienes tendencia a las piernas pesadas, es mejor apostar por ropa cómoda y calzado con buena base, especialmente en verano.
En definitiva, todo suma: lo que haces, lo que eliges y cómo te cuidas. Ningún producto hace milagros por sí solo, pero cuando se combina con buenos hábitos, el cambio se nota. Y tus piernas lo van a agradecer todos los días.
Si este verano notas las piernas más pesadas o hinchadas de lo habitual, pásate por Farmacia Rodulfo en Puerto de la Torre (Málaga). Te asesoramos personalmente y te ayudamos a encontrar la crema, gel o suplemento drenante más adecuado para ti. ¡Estaremos encantados de ayudarte a sentirte más ligera cada día!