17 de octubre de 2025

¿Problemas de tensión arterial? Aquí tienes las mejores estrategias naturales y médicas para mantenerla estable.

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¿Y si tu tensión arterial hablara, qué te diría?

Tal vez te recordaría que le sobra sal, que necesita un paseo más o que agradece un buen descanso nocturno. Y, es que, la presión no es solo un número: es un reflejo de cómo vivimos. Regularla significa escuchar esas señales y actuar a tiempo.

¿Qué significa tener la tensión alta o baja?

La tensión arterial es la presión que ejerce la sangre sobre las paredes de las arterias en cada latido. Se expresan dos cifras: la sistólica (cuando el corazón se contrae) y la diastólica (cuando se relaja). Por ejemplo, 120/80 mmHg es una lectura considerada normal.

Cuando estas cifras se elevan de forma repetida (por encima de 130-140 mmHg sistólica o 85-90 mmHg diastólica, según guías), hablamos de hipertensión. Si bajan demasiado (por ejemplo, 90/60 o menos), hablamos de hipotensión, que también puede causar síntomas molestos.

El problema de la hipertensión es que muchas veces no presenta síntomas claros hasta que hay daño en vasos, corazón o riñones. Por eso se la llama “enemigo silencioso”. Regular la tensión significa mantenerla dentro de rangos seguros para prevenir esas complicaciones a largo plazo.

Cómo regular la tensión con hábitos saludables

No hace falta hacerlo todo de golpe. Lo importante es dar pasos realistas que puedas mantener.

Reduce la sal, gana en salud

El exceso de sodio favorece la retención de líquidos y eleva la presión. No se trata de comer sin sabor, sino de aprender a cocinar con especias, hierbas aromáticas o limón. Leer etiquetas y elegir versiones sin sal añadida también ayuda a rebajar el consumo sin esfuerzo.

Come lo que de verdad te cuida

Frutas, verduras, legumbres y cereales integrales deben estar en tu plato cada día. Aportan potasio, magnesio y fibra, que ayudan a equilibrar la presión. Reducir procesados, embutidos y bollería industrial es otra buena decisión. Una alimentación sencilla, fresca y variada es uno de los mejores tratamientos naturales.

Muévete de forma regular

El ejercicio no tiene que ser extremo. Caminar media hora a buen ritmo, nadar, montar en bici o bailar son actividades suficientes para mejorar la elasticidad de tus arterias y reducir la presión. Lo importante no es la intensidad, sino la constancia.

Controla el peso sin obsesionarte

Perder unos pocos kilos, cuando hay sobrepeso, puede suponer un descenso notable de la tensión. No se trata de dietas imposibles, sino de ajustar raciones, aumentar vegetales y beber más agua. Lo que importa no es la báscula, sino darle un respiro al corazón.

cómo regular la tensión

Duerme bien y relaja tu mente

El descanso nocturno regula hormonas que influyen directamente en la presión. Dormir entre siete y ocho horas es más terapéutico de lo que creemos. El estrés, por su parte, es un desencadenante de la hipertensión: practicar técnicas de respiración, yoga o incluso paseos tranquilos puede ayudarte más de lo que imaginas.

Di adiós al tabaco y controla el alcohol

El tabaco endurece las arterias y el alcohol las sobrecarga. Reducir o eliminar ambos es probablemente el cambio más eficaz que puedes hacer para tu salud cardiovascular. Y recuerda: en la farmacia podemos ayudarte a encontrar recursos para dejar de fumar con éxito.

Plantas que ayudan a regular la tensión arterial

Además de los cambios en la rutina, muchas personas se preguntan si existen opciones naturales que apoyen el control de la tensión. Algunas plantas medicinales pueden ser un buen complemento, siempre con el consejo del farmacéutico.

El espino blanco, por ejemplo, se ha utilizado tradicionalmente para favorecer la relajación de los vasos sanguíneos y proteger el corazón. El hibisco, tomado en infusión, también se asocia con una ligera bajada de la presión arterial y tiene un sabor muy agradable.

Por otra parte, las hojas de olivo aportan compuestos fenólicos con efecto beneficioso sobre la tensión. Y plantas con acción diurética suave, como la cola de caballo o el diente de león, ayudan a reducir la retención de líquidos.

Eso sí, recuerda: estas plantas no sustituyen a la medicación si ya tienes hipertensión diagnosticada. Son un apoyo leve y natural, pero pueden interactuar con tratamientos. Por eso es importante consultarlo siempre en la farmacia antes de incorporarlas.

Pastillas para regular la tensión: cuándo son necesarias

En algunos casos, por mucho que cuidemos la dieta y la actividad física, la tensión no baja lo suficiente. Es entonces cuando el médico prescribe medicación específica. Estas pastillas para regular la tensión arterial son muy efectivas y su objetivo es reducir el riesgo cardiovascular a largo plazo.

Existen varios tipos: diuréticos, betabloqueantes, inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, antagonistas del calcio, entre otros. Cada uno actúa de manera diferente y el médico elegirá el más adecuado para ti.

Lo fundamental es ser constante: tomarlas a la hora indicada y no suspender el tratamiento por cuenta propia. Aunque la tensión esté controlada, la hipertensión suele ser crónica y necesita un seguimiento continuo.

Medición y control en la farmacia: un servicio cercano y útil

¿Sabías que una medición incorrecta puede dar cifras engañosas? La postura, la hora del día o incluso hablar durante la toma influyen en el resultado. Por eso es importante medir la tensión con un protocolo adecuado.

En Farmacia Rodulfo ofrecemos un servicio de medición y control de la tensión arterial que te asegura resultados fiables y, además, te permite llevar un registro histórico. Así puedes comprobar cómo evolucionan tus cifras con el tiempo, si el tratamiento está funcionando o si los cambios en tu estilo de vida están dando frutos. Contacta con nosotros y dinos tu problema y lo vemos en persona.

Nuestro equipo te acompaña en todo el proceso: te enseñamos a tomarte la tensión correctamente, resolvemos dudas y te orientamos sobre cuándo es conveniente acudir al médico. También podemos asesorarte sobre tensiómetros de uso doméstico, para que tengas un control adicional en casa sin cometer errores.

¿Cada cuánto he de medir la tensión arterial?

Si eres una persona sana, sin antecedentes de hipertensión ni factores de riesgo importantes, bastará con una medición ocasional, por ejemplo una vez al año en tu revisión médica o cuando vengas a la farmacia. La tensión tiende a subir con la edad, así que conviene no descuidar el control aunque te encuentres bien.

En cambio, si ya te han diagnosticado hipertensión, el seguimiento debe ser más regular. Durante las primeras semanas tras empezar cambios en la dieta o un nuevo tratamiento, lo recomendable es medirse a diario —incluso dos veces al día, mañana y tarde— para comprobar cómo responden las cifras. Una vez que la tensión esté estabilizada, puede bastar con controles cada pocos días, siempre siguiendo la pauta que te haya dado tu médico.

También hay situaciones concretas que merecen atención extra: si tomas medicación nueva, si notas mareos, dolores de cabeza inusuales, palpitaciones o si atraviesas un periodo de estrés intenso. En esos casos, venir a la farmacia para comprobar tu tensión puede sacarte de dudas rápidamente.

En Farmacia Rodulfo recomendamos integrar la toma de tensión en la rutina de salud, sin obsesionarse pero sin olvidarla. Nuestro servicio de medición y control de la tensión arterial te ofrece la tranquilidad de cifras fiables, registradas y supervisadas por un profesional que puede orientarte sobre el siguiente paso. Contacta con nosotros si tienes alguna duda.

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